Friday, March 12, 2010

UNA MENTIRA LOS MATA

Al triunfar La Revolución Cubana, en 1959, toda la nación sintió una gran conmoción. Se esperaba, que viniera para Cuba, una era de justicia y bienestar social sin precedente y una bonanza económica a la altura de la nueva conquista; pero no fue así, rápidamente, Fidel Castro, tomó el control total del nuevo gobierno y comenzó por descabezar a los dirigentes de otros grupos revolucionarios que también combatieron al gobierno depuesto.
Ya, desde los primeros tiempos de la lucha, Fidel se las arregló para hacerse de la voluntad, de hombres del pueblo, a los que convenció para militar en su propia organización y con los cuales, después de llevarlo a la muerte, levanto una buena cantidad de mártires importantes que le permitieron tener la causa, para justificar su lucha; lo cierto es, que en esa primera etapa, se acercó a los grupos más humildes para reclutar a sus nuevos seguidores y dentro de ellos tomó de todas las razas. El más sobresaliente, de la raza negra, fue Juan Almeida Bosque, por ser, el único sobreviviente negro del asalto al Cuartel Moncada en Santiago de Cuba. Fidel, fue hábil al concederle a este negro reconocimiento como combatiente y otorgarle el grado de comandante, para justificar su política igualitaria delante del pueblo. Con este gesto, ganó que otros negros se les unieran a la lucha y algunos de ellos, muy pocos, tuvieron alguna posición más o menos importante ante la vista pública, dentro y fuera de Cuba.
A los negros, se les hizo ver que todo había cambiado a favor de ellos, ya la nación no estaría más dividida socialmente entre negros, mestizos y blancos. A partir de entonces, todos serian iguales y tendrían los mismos derechos en cuanto a justicia y oportunidades. Los negros podrían visitar los clubes blancos y nadie le podría objetar el hacerlo, todos eran iguales decían los redentores de la sociedad. Esto más o menos fue así y tantos blancos como negros tenían derecho a asistir a las escuelas e ir a las universidades del país, que en poco tiempo, fueron tomadas y controladas por El Estado.
Es cierto, que muchos negros tuvieron oportunidades, que de otra manera, les hubiera sido muy difícil lograr. Digo difícil; porque algunos negros lo habían logrado con esfuerzos al igual que algunos blancos pobres. Pero esta, fue la forma de comprar el apoyo de la raza negra, que lo sirvieron incondicionalmente, porque se sentían con el compromiso moral de hacerlo. También, tuvo la habilidad de apoyar el movimiento negro por los derechos civiles de Los Estados Unidos y los convenció de que los apoyaba y los protegía, idea que ellos siempre han mantenido hasta ahora y que les ha servido para ganar colaboradores dentro de los negros americanos de una manera permanente y casi total.
Pero, la realidad fue, que a excepción de dos o tres, los negros en sentido general, han sido excluidos de las esferas superiores del gobierno y solo en muy pequeño porciento han tenido alguna participación en esas posiciones importantes. Los otros, solo han servido en cargos inferiores y también, en un porciento muy pequeño de ellos lo han logrado, dentro de las llamadas FAR y MININT.
Como el negro se sintió halagado en su ego, por las supuestas prebendas que obtenían, apoyaron en mucho al sistema de Los Contrarrevolucionarios hermanos Castros, que después de liquidar a sus antiguos compañeros se habían hecho con las redes del poder de una manera pragmática y totalmente represiva con todos. Ya no había marcha a tras, solo era huir o apoyar a los facinerosos usurpadores que se habían robado a la revolución. Ahora los blancos emigraban en su mayoría o iban a las cárceles, donde los trataban de resquebrajar moralmente. Pero, a los pocos negros que se oponían al nuevo sistema, los trataban peor, les aplicaban todo el rigor del despótico poder para arrasarlos. Muchos de ellos, sufrieron iniquidades insospechadas y vejaciones sin par, algunos hasta murieron en huelgas de hambres por mantener sus principios, por encima de los niveles de cualquiera, pero sufrieron mucho. Ahora, es la hora final, ya el negro mira, que al igual quel blanco ya no puede sufrir más vejaciones, pero al mismo tiempo sabe, que el sistema, que no le da tregua a nadie, menos se las dará a ellos y que el grado de vejación para ellos siempre va a ser mayor. Es por eso, que se sienten, quizás, con mayor responsabilidad, para en su combate llegar a los extremos mayores de sacrificio, porque fueron engañados y burlados por una mentira canalla, de un maldito demegogo y falsante gobernante. Nicolas

1 comment:

Judy said...

Padrino, no se como ni que contestar. Siento tantas cosas, que a veces no se como responder. Pero si te digo esto que me molesta todo lo que los Cubanos estan pasando, aunque haiga nacido aqui en Los Estados Unidos. Pero no entiendo porque los Cubanos no tratan de hacer algo por su pais.